Isla de Jorganes

En Santander (de donde provengo), está muy extendido en verano el juego de las palas. En otros lugares, también se juega a las palas, pero normalmente éstas son mucho más pequeñas y las pelotas también más ligeras y más blanditas. En realidad, si probáis ambos tipos, veréis que no tienen comparación.

Las palas de Santander miden más de medio metro de largo, veintitantos centímetros de ancho, tienen un grosor de un centímetro y medio y pesan casi 700 gramos.

Quizás en el País Vasco, también se juegue. Lo digo porque he visto en una web —que dice ser la más antigua de Cantabria sobre el tema—, que uno de los posibles orígenes de las palas se debe a un viaje que hizo un santanderino y un granadino a Biarritz, en donde vieron un tipo de juego de palas que luego llevaron para Cantabria.

También se dice que se originó en la playa de la Magdalena hacia 1928, en las proximidades del Club de Tenis, en dónde varias personas cedían las pelotas que caían a la playa desde el Club a 50 céntimos o a peseta, y aprovechaban para jugar al tenis en las proximidades. Viendo que la raqueta clásica no aguantaba, idearon las palas de madera.

Como ya hay días que empieza a hacer calor, y enseguida querréis lucir vuestro estupendo cuerpo, podéis empezar a poneros en forma jugando a las palas. Si no tenéis, podéis hablar con mi amigo Félix, que las decora y hace auténticas preciosidades.

Si os habéis pasado últimamente por este sitio, habréis visto que recientemente he colgado en una esquinita un retrato que me hizo ese individuo hace ahora como veinte años. Pulsando sobre él, podréis ir a su página, en la que tendréis ocasión de admirar gran parte de su obra artística.

Yo a cambio de esta propaganda, solo espero que me regale la pala «flx5ce» que tiene un tema muy apropiado para esta web. Sería un justo intercambio; pues yo que soy muy vanidoso, he puesto hoy en el Google «Jorganes» y ha aparecido en primer lugar su página web :-( ¡Eso no sucederá en cuanto mi página coja la fama que merece!